El tribunal que lo juzga esperaba que volviera a participar hoy, después de que médicos legistas informaron que está afectado por una huelga que anunció hace una semana, por no haber comido ni tomado líquidos, según dijo.

Los médicos informaron en la audiencia anterior que Castillo había terminado su ayuno, por el que fue hospitalizado y estaba recuperado y en condiciones de comparecer ante los jueces hoy.

Sin embargo hoy se negó a ser trasladado de su celda a la audiencia que se realiza en la prisión para altos funcionarios en la que se mantiene desde su detención y destitución por el Parlamento, tras intentar disolverlo, en diciembre de 2022.

Los médicos informaron sin embargo que padece de lumbalgia y sufre ptros malestares, por lo que debería descansar y consideraron que estará en condiciones de asistir a la audiencia del jueves próximo.

El abogado de oficio de Castillo, Jhony Hernández, pidió que el acusado se presente en la audiencia para confirmar su negativa a participar en el juicio, a lo cual, según el letrado, tiene derecho.

El tema consumió la mayor parte de la audiencia de hoy, en la que los jefes militares (hoy jubilados) que se negaron a acatar la orden de Castillo de disolver el Congreso, declararon y respondieron preguntas sobre la posición que asumieron, cerrando filas con el Parlamento de mayoría conservadora.

De otro lado, la esposa de Castillo, Lilia Paredes, manifestó en la red X desde México, donde se encuentra asilada junto a sus dos hijos, su preocupación por la situación del exmandatario y pidió que organizaciones de derechos humanos intercedan por él.

El expresidente difundió en la red X una carta manuscrita de sus hijos Alondra y Arnol, en la que le piden que cuide su salud y suspenda su huelga de hambre.

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