Residentes en la ciudad de Esmeraldas, capital de la provincia homónima, cerraron vías de la urbe ante la falta del líquido vital debido a la rotura del Sistema de Oleoducto Transecuatoriano (SOTE) que provocó un derrame de petróleo de grandes magnitudes.
‼️#URGENTE
"Pedimos agua y nos mandan militares”, señalan ciudadanos esmeraldeños que exigen al gobierno de Noboa abastecimiento de agua tras el derrame de crudo.
▶️ @alexismoncayo https://t.co/yzdAYyRHTR— Ecuadorinmediato (@ecuainm_oficial) March 19, 2025
En un video difundido en Tik Tok, uno de los manifestantes, identificado como José Maffares, cuestionó que en lugar de enviar agua, el Gobierno de Daniel Noboa les mandó militares para dispersar a la gente.
“Estamos pidiendo agua y nos mandan militares (…) Esto es el Gobierno del Encuentro, el Gobierno que Resuelve”, reclamó el ciudadano.
La rotura del SOTE tuvo lugar el pasado jueves 13 de abril como consecuencia de deslizamientos de tierras por las fuertes lluvias en la zona.
El derrame contaminó varios ríos, incluidos los que abastecen de agua potable a cerca de 500 mil familias esmeraldeñas.
Ciudadanos también denunciaron que el agua entregada por el Gobierno está contaminada y acusaron a la empresa Petroecuador de enviar el líquido vital en camiones cisterna que previamente transportaron combustible.
Por eso señalan que el agua presenta residuos oleosos, aspecto turbio y una textura aceitosa, lo cual ponen en riesgo la salud de quienes ya vieron contaminadas las fuentes hídricas de la región.
Lendy Bennett, gerente de la Empresa Pública Mancomunada de Agua Potable y Saneamiento, confirmó que el agua entregada no es apta para el consumo humano y advirtió que “ni con tres mil tanqueros diarios se solucionará el problema”, pues son necesarias medidas urgentes y definitivas.
La víspera, Ronal Moreno, alcalde de Quinindé, otra de las localidades afectadas, lamentó que el 75 por ciento de la población de su demarcación presenta problemas respiratorios, el 20 por ciento sufre afecciones en la piel y el 5 por ciento reporta trastornos digestivos.
Además de los camiones, buques de la Armada ecuatoriana comenzaron a llevar agua potable, pero al parecer es insuficiente.
A su vez, la contaminación paralizó la actividad pesquera y la agricultura, fuentes de ingresos en la región esmeraldeña junto al turismo.
Por otro lado, el Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, llamó a voluntarios a ayudar en tareas de limpieza y restauración del Refugio de Vida Silvestre Manglares Estuario Río Esmeraldas, cuya cobertura vegetal del ecosistema manglar, así como la fauna y los sedimentos acuáticos sufrieron daños.
Los técnicos y trabajadores de Petroecuador prosiguen lentamente los trabajos de recolección del crudo derramado y en la reparación del oleoducto, algo necesario para recuperar el bombeo y no afectar a las exportaciones de petróleo.
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