Tanto este documento, como las declaraciones de condena de la Cancillería, son los últimos movimientos de Beijing ante el anuncio la víspera de la Casa Blanca sobre aranceles del 104 por ciento en total a los productos del gigante asiático.

El texto dividido en seis secciones, además del prólogo y conclusiones, aborda temas clave como el carácter mutuamente beneficioso de los nexos entre ambos países.

También destaca el cumplimiento por parte de China del acuerdo comercial de la primera fase firmado con Estados Unidos, mientras critica las violaciones de Washington a sus compromisos en dicho acuerdo.

El libro blanco señala que, desde el establecimiento de relaciones diplomáticas hace 46 años, el comercio bilateral entre las dos naciones creció significativamente.

Este intercambio pasó de menos de dos mil 500 millones de dólares en 1979 a casi 688 mil 300 millones de dólares en 2024.

Sin embargo, en años recientes, el surgimiento del unilateralismo y el proteccionismo estadounidense ha perturbado gravemente la cooperación económica normal entre ambos países, agrega el texto.

De acuerdo con la fuente, desde 2018 Estados Unidos ha impuesto aranceles de más de 500 mil millones de dólares a productos chinos exportados al país norteño, además de introducir políticas para contener y reprimir a Beijing.

El texto rechaza las recientes acciones de Washington, incluida la imposición de nuevos aranceles y restricciones bajo la justificación de políticas como «Estados Unidos primero».

Estas medidas, descritas como coercitivas y unilaterales, contradicen los principios del multilateralismo y las reglas de la Organización Mundial del Comercio, al tiempo que afectan profundamente las relaciones comerciales bilaterales, apunta el libro.

EL documento reitera que el núcleo de las relaciones comerciales entre China y Estados Unidos es la cooperación mutuamente beneficiosa.

En opinión de Beijing, aunque existen diferencias naturales entre dos economías con diferentes sistemas y etapas de desarrollo, lo esencial es respetar los intereses fundamentales de cada parte y resolver los problemas mediante el diálogo.

«Una guerra comercial no tiene ganadores, y el proteccionismo no tiene futuro», afirma el documento y agrega que el éxito de una nación no debe ser visto como una amenaza para la otra.

El libro blanco insta a Estados Unidos a avanzar en la dirección indicada por los líderes de ambos países durante sus conversaciones recientes, promover una relación económica basada en el respeto mutuo, la coexistencia pacífica y la cooperación beneficiosa para ambas partes.

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