El embajador de Japón en Bangladesh, Saida Shinichi, y el jefe de Misión de la OIM Bangladesh, Lance Bonneau, firmaron un Canje de Notas en ese aspecto, según un comunicado divulgado por la agencia de prensa Bangladesh Sangbad Sangstha.

El proyecto beneficiará a aproximadamente 500 mil refugiados centrándose en intervenciones de gestión y desarrollo de sitios, protección, alojamiento y artículos no alimentarios, distribución de gas licuado y agua, saneamiento e higiene.

El diplomático japonés expresó su esperanza de la mejora de las condiciones de vida gracias al apoyo de su Gobierno.

Japón seguirá trabajando para encontrar soluciones sostenibles y cooperará con organizaciones internacionales como la OIM, señaló.

El jefe de la OIM en Bangladesh afirmó que, en su octavo año, la atención sobre la actual crisis humanitaria de los rohingyas en Bangladesh ha disminuido, aunque las necesidades siguen siendo inmensas.

Esta contribución permitirá seguir respondiendo a las necesidades vitales de los refugiados, proporcionándoles agua y refugio, y mejorando sus vidas y las de sus comunidades de acogida mediante servicios de protección, apoyo para la subsistencia y el fortalecimiento de su resiliencia ante los desastres relacionados con el clima y otros desafíos que enfrentan, dijo.

En estrecha coordinación con el Gobierno de Bangladesh y sus socios, añadió, la OIM mantiene su firme apoyo a esas comunidades necesitadas.

Desde el comienzo de la emergencia en agosto de 2017, Japón ha apoyado firmemente la respuesta rohingya en Bangladesh, aportando más de 250 millones de dólares a la OIM y otras agencias de las Naciones Unidas, así como a ONGs en Bangladesh, incluso a través de esta nueva financiación, según Bangladesh Sangbad Sangstha.

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