En una decisión calificada como «un hito en la justicia social», el proyecto, beneficia a cientos de trabajadores del sector público, quienes históricamente habían quedado excluidos de los beneficios de la jubilación.

El primer ministro y ministro de Finanzas, Terrance Drew, destacó que la reforma «es una declaración de quiénes somos como pueblo» y subrayó su impacto en la construcción de una sociedad más equitativa:

«Este proyecto les dice a cada empleado auxiliar, a cada limpiador, a cada guardia de cruce escolar que valoramos su trabajo y honraremos su contribución cuando llegue su jubilación. No es un acto de lástima, es un derecho ganado con esfuerzo», enfatizó el mandatario .

La reforma fortalece la seguridad social y reduce el riesgo de pobreza en la vejez, uno de los pilares del gobierno, pero los sindicatos, aunque valoraron el avance, pidieron supervisión en la implementación para garantizar transparencia en los fondos.

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