Un informe publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas (Istat) destaca que este resultado se logró como consecuencia de un aumento en el valor añadido tanto en el sector de agricultura, silvicultura y pesca, así como en el industrial, mientras que los servicios se mantuvieron estacionarios.
Por el lado de la demanda, se apreció en esa etapa una contribución positiva del componente interno, aunque sus valores fueron negativos en cuanto al externo, precisaron en su estudio los expertos de ese organismo gubernamental.
El resultado sigue las señales, también positivas, del cuarto trimestre de 2024, cuando el crecimiento trimestral fue del 0,2 por ciento, apuntaron los especialistas, quienes añadieron que este aumento del PIB en el primer trimestre de 2025 refleja crecimiento tanto en el sector primario como en el industrial.
Giancarlo Giorgetti, ministro italiano de Economía y Finanzas, resaltó en declaraciones a la prensa que “el Istat certificó un crecimiento positivo para el primer trimestre, superior al de otras naciones europeas”.
Se trata, según dijo, de “una señal importante que demuestra la exactitud de nuestras previsiones y la eficacia de las políticas económicas del gobierno”.
Un análisis divulgado en el sitio digital informativo especializado Mondo Economico, refiere que “este resultado representa una mejora significativa respecto al estancamiento observado en el trimestre anterior y sitúa a Italia en un rango intermedio respecto a otros grandes países europeos”.
Esta nación se situó ligeramente por debajo de la media de la Unión Europea, que registró un aumento trimestral del 0,4 por ciento en el PIB, pero superó a Alemania y Francia, que lograron incrementos del 0,2 y 0,1 puntos porcentuales, respectivamente, aunque quedó detrás de España, con un alza de 0,6 puntos, agrega esa fuente.
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