Un informe publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas (Istat), evidencia la inflación que prevalece en este país, con una aceleración del 27,2 al 31,7 por ciento en el precio de los bienes energéticos regulados, mientras que el de los productos alimenticios sin procesar subió desde los 3,3 hasta los 4,2 puntos porcentuales.

También se apreciaron incremento en los precios de los alimentos procesados, del 1,9 al 2,2 por ciento, en tanto los de los servicios relacionados con el transporte se elevaron desde 1,6 hasta alcanzar los 4,4 puntos porcentuales, precisaron los especialistas de ese organismo gubernamental.

En abril, la denominada inflación básica, que excluye a la energía y los alimentos frescos, se aceleró desde 1,7 hasta 2,1 puntos porcentuales, mientras que la que se calcula sin tenerse en cuenta los productos energéticos pasó del 1,8 al 2,2 por ciento.

El crecimiento tendencial de los precios de los bienes se desaceleró del 1,5 al 1,0 por ciento, pero el de los servicios aumentó desde 2,5 hasta 3,0 puntos porcentuales.

La brecha de la inflación en Italia entre los sectores de servicios y bienes se amplió y alcanzó los 2,0 puntos porcentuales, muy superior a la del 1,0 por ciento registrada en el mes anterior, agrega la fuente.

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