Las tres asociaciones de familiares y ciudadanos en general víctimas de la Depresión Aislada de Niveles Altos (DANA), expusieron al jefe del Ejecutivo distintas situaciones e ideas.

El fenómeno atmosférico provocó la muerte de 228 personas en la provincia de Valencia y cuantiosos daños materiales. El Gobierno aprobó ayudas por más de 11 mil millones de euros, pero las labores de recuperación tendrán costos más altos y requerirán de largo tiempo.

Sánchez recogió este jueves la petición de las asociaciones para celebrar un funeral de Estado en memoria de las víctimas de las inundaciones del pasado 29 de octubre, durante una reunión efectuada en la sede de la Delegación del Gobierno en Valencia.

Además, les informó que su administración está está trabajando en un plan para prevenir y preparar el territorio para «minimizar los riesgos» en caso de inundación, que se ejecutarán a partir de 2026.

En esa línea, subrayó la necesidad de mejorar los protocolos de emergencia y la transmisión de información a los ciudadanos en situaciones de riesgo.

Según un comunicado del Palacio de la Moncloa, Sánchez refirió que la iniciativa la adelanta la vicepresidenta tercera Sara Aagesen, ministra par la Transición Ecológica, y puntualizó que abarca un paquete de reformas hidráulicas, y actuaciones de protección frente a inundaciones.

Insistió en el imperativo de lograr que en casos como estos, la información sea procesada de forma adecuada «por quienes tienen que tomar decisiones» en situaciones de riesgo.

Al respecto, consideró que se debe luchar contra la desinformación, y reforzar los sistemas de medición para que sean «más resilientes» en las actuales condiciones de cambio climático.

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