Según fuentes locales, el activista keniano Boniface Mwangi fue detenido junto al abogado ugandés Agather Atuhaire, después de viajar para observar la audiencia.

Ambos dijeron formar parte de una delegación de África Oriental pero permanecen bajo custodia de las autoridades de inmigración de Tanzania.

Por su parte, la presidenta de Tanzania, Samia Suluhu, advirtió contra una intromisión extranjera, luego de otros intentos fallidos de juristas extranjeros, por asistir a la audiencia.

Días antes, Willy Mutunga, expresidente del Poder Judicial de Kenya y otros dos funcionarios, fueron también detenidos en el aeropuerto de Dar Es Salam a su llegada a Tanzania.

Mutunga y sus acompañantes pretendían asistir a la vista preliminar del juicio contra el líder opositor tanzano, Tundu Lissu, procesado por un presunto delito de traición y por publicación de información falsa.

Lissu es el presidente del Partido de la Democracia y el Progreso (Chadema), opositor del actual gobierno presidido por Samia Suluhu Hassan.

Poco antes de este incidente, las autoridades de inmigración de Tanzania negaron la entrada al país de la abogada keniana Martha Karua, y dos acompañantes, que también pretendían participar en el juicio a Lissu. Todas fueron obligadas a regresar a su país.

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