Por Fausto Triana
Para establecer un orden, la mayor novedad es el regreso de Francisco Alarcón (Isco) a la convocatoria de la selección nacional. Pudiera ser pieza clave del mediocampo español, en el choque de semifinales de la Nations League contra Francia.
Exjugador del Real Madrid, Isco volvió a brillar en sus presentaciones con el Betis y es uno de los artífices de la primera final europea del club andaluz, la Conference League, frente al Chelsea inglés este miércoles.
La victoria ayer 3-0 del Barça ante el Athletic de Bilbao fue puro trámite. En definitiva, el equipo del germano Hansi Flick logró la mayor regularidad en su rendimiento en una temporada que pasó factura en lo físico a varios estelares, tanto de los azulgrana como del Real Madrid, con un agridulce subtítulo.
En verdad, la calidad del brasileño Raphinha, el jovencito Lamine Yamal y el veterano polaco Robert Lewandowski, junto con la brillante conducción de Pedri como volante creativo, permitieron a los culés salir adelante en los momentos cruciales.
Se impusieron a los merengues en la final de la Supercopa de España, luego doblegaron al Atlético Madrid en semifinales de la Copa del Rey y en esta competición, volvieron a batir a la “casa blanca”.
Sin dudas la superioridad manifiesta de los catalanes sobre los madridistas (éxito en los cuatro Clásicos), fue clave para el palmarés del conjunto de la Ciudad Condal, con el desliz de caer en semifinales de la Champions ante el Inter de Milán.
Pero, volviendo a la actualidad, este lunes asimismo, llega la firma de contrato por tres años de Xabi Alonso como técnico principal del Real Madrid. Será presentado, mientras el italiano Carlo Ancelotti ya se prepara para asumir las riendas de la canarinha, la selección de Brasil.
Como telón de fondo, el colofón de la extraordinaria trayectoria del croata Luka Modric, quien deja el Real Madrid con una mochila increíble de 28 títulos, seis de ellos en Champions, con la posibilidad de incrementarlos si la escuadra gana el Mundial de Clubes de junio.
En realidad, el emotivo adiós de Modric en el Santiago Bernabéu marcó su última vez de blanco en los predios de los merengues, aunque el cierre definitivo será con la cita de clubes en Estados Unidos.
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