“El ataque, que ha causado múltiples víctimas en la capital #Teherán, entre ellas la muerte de dos científicos vinculados al programa nuclear y de altas autoridades civiles y militares, es una provocación a Irán y abre el riesgo de generar mayor inestabilidad en esa región”, escribió el dignatario en su cuenta de X.

Arce expresó “profunda solidaridad con el hermano pueblo y el Gobierno de Irán (…)”, e hizo votos por el pronto restablecimiento de la calma.

Por su parte, el exmandatario del país andino-amazónico Evo Morales también condenó con mucha firmeza el ataque “del Estado Genocida de Israel en contra de la República Islámica de Irán”.

Advirtió el primer expresidente indígena de Bolivia que, además del genocidio, Israel ha tomado la decisión de expandir sus agresiones por el resto de esa región del planeta.

“El mundo no puede ni debe permitir que esto continúe. Nuestra solidaridad con el Gobierno y el pueblo de Irán. Nuestros pensamientos también están con el pueblo palestino”, concluyó Morales.

Según informaciones, el Ejército israelí atacó este viernes sin previa declaración de guerra diversas zonas de Irán con el objetivo declarado de destruir el programa nuclear de ese país.

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron el inicio de la operación “León Ascendente”, mientras el primer ministro de ese país, Benjamin Netanyahu, afirmó que la campaña continuaría “durante muchos días” contra esos centros y para degradar la capacidad militar de esa nación musulmana.

En reiteradas ocasiones, las autoridades civiles y militares de Irán alertaron que responderían con total firmeza cualquier agresión israelí o estadounidense, por lo cual se da por descontado una dura reacción de Teherán.

De acuerdo con los primeros reportes, la incursión inicial tuvo como objetivo instalaciones nucleares, depósitos de armas, baterías de defensa antiaérea y complejos militares.

Tras el inicio de la ofensiva aérea, en al menos cinco oleadas, las FDI llamaron a las armas a miles de reservistas.

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