El buque había sufrido daños durante la primera maniobra de botadura el pasado 21 de mayo, pero un equipo de ingenieros y técnicos logró repararlo en corto tiempo, en un astillero con más condiciones.

En la apertura de la ceremonia, el secretario del Comité Central del PTC, Jo Chun Ryong, destacó que esta es la segunda nave de guerra construida en el país en menos de un año, una señal del fortalecimiento de las fuerzas navales nacionales.

El destructor, bautizado con el nombre de Kang Kon, héroe de las luchas contra el colonialismo japonés y primer jefe de Estado Mayor General del Ejército Popular de Corea, se incorporará a Flota del Mar Este de las Fuerzas Marítimas de la PDC.

En un encuentro con el personal que participó en la recuperación del navío, Kim los felicitó por sus empeños y lamentó los resultados del primer intento de botadura, que atribuyó al descuido, la irresponsabilidad y el empirismo falto del fundamento científico.

El también presidente del Comité de Asuntos Estatales señaló que, pese a aquel revés momentáneo, la industria naval nacional ha probado ser capaz de continuar fortaleciendo el poderío de las fuerzas navales.

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