Después de asegurar la victoria tras ser el único en saltar los 6,00 m, el prodigio de la garrocha mejoró su primado universal en su primer intento, delante de los eufóricos aficionados suecos, de pie en el estadio olímpico de ladrillos rojos, construido para los Juegos Olímpicos de 1912.

«Será uno de los mejores recuerdos de mi carrera», celebró el plumarquista del orbe, de 25 años.

Una vez superó la altura, Duplantis se quitó su camiseta amarilla y azul y corrió directo a los brazos de su madre, en el recinto en el que más récords del mundo de atletismo se han establecido, algo que no ocurría sin embargo desde 1997.

La superestrella sueca ganó la prueba por delante del australiano Kurtis Marschall (5,90 metros) y del neerlandés Menno Vloon (5,80).

En otra atractiva competición del mitin, la neerlandesa Femke Bol batió el récord de la reunión al conquistar los 400 metros con vallas en 52.11 segundos, su mejor marca de la temporada.

«Es uno de mis estadios favoritos así que batir el récord del estadio me hace muy feliz. No estoy todavía a mi mejor nivel y ganar la medalla es particularmente gratificante», afirmó la medallista de bronce en los Juegos Olímpicos de París 2024.

Desde el carril número seis, Bol tomó la punta de la carrera a partir de la primera media vuelta de la pista y ganó la reunión por quinta vez en seis años en Estocolmo, por delante de la estadounidense Dalilah Muhammad (52.91) y de la panameña Gianna Woodruff (53.99).

En los 100 metros, la victoria quedó en poder de la vigente campeona olímpica de la distancia, la santalucense Julien Alfred, quien logró el triunfo con tiempo de 10.75 segundos, a tres centésimas de su récord personal y con la segunda mejor marca mundial de la temporada.

En el salto de altura, la australiana Nicola Olyslagers, subcampeona olímpica, obtuvo su mejor registro de la temporada con una cota de 2,01 metros por delante de la actual monarca bajo los cinco aros, la ucraniana Yaroslava Mahuchikh, quien llegó hasta los 1,99 m.

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