“Estimo que la audiencia cautelar será mañana (viernes) a primera hora”, afirmó el reconocido jurista constitucionalista al ser consultado por representantes de medios periodísticos.

La víspera, Siles se presentó en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), en La Paz, e inmediatamente fue aprehendido en cumplimiento de una orden emitida el miércoles último por la comisión de fiscales del caso.

Gutiérrez sostuvo que la aprehensión de Siles fue sorpresiva, pues antes de eso no habían sido notificados con la decisión de la fiscalía, la cual fue anunciada la noche del miércoles en conferencia de prensa en Santa Cruz por el titular del Ministerio Público, Róger Mariaca.

Ejecutada la captura, Siles pasó la noche del jueves y amaneció este viernes en celdas de la Felcc.

Según la orden de aprehensión ejecutada, el exministro es investigado por delitos de tráfico de influencias y consorcio.

El viernes último, el ahora pesquisado renunció a sus funciones y argumentó que era víctima de rumores que tenían como objetivo mancillar su trayectoria profesional.

Sin embargo, la información que ha trascendido sobre el denominado caso Consorcio, indica que con este complot que involucra a un grupo de operadores de justicia, se pretendía destituir a la magistrada del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) Fanny Coaquira, electa el 15 de diciembre último con más del 60 por ciento del voto popular.

De esa forma, se buscaba habilitar en su lugar a su suplente Iván Campero, con el propósito de controlar el Órgano Judicial.

Siles cayó en desgracia cuando fue filtrado un audio, en el cual presuntamente se le escucha coordinar por vía telefónica con el juez del municipio paceño de Coroico, Fernando Lea Plaza, un fallo contra Coaquira y a favor de su suplente.

De acuerdo con las investigaciones preliminares, esta acción contó con la participación de otras autoridades judiciales como la vocal Claudia Castro y el ahora expresidente del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz (TDJ) Yván Córdova.

La onda expansiva movilizó a la Unidad de Transparencia del TSJ, la cual denunció que se trató de una operación “estructurada” desde un consorcio judicial con respaldo político.

Eso derivó en la intervención directa del TSJ y la solicitud de investigación penal.

Como resultado, ya fueron aprehendidos Siles, Castro, Campero, Lea Plaza y el abogado José Ramiro Uriarte, mientras que Córdova renunció a su cargo, tras ser internado en un centro médico.

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