El Centro del Sistema de Seguridad Nuclear iraní anunció que “tras el criminal ataque estadounidense contra las instalaciones nucleares de Fordow, Natanz e Isfahán” realizó de inmediato las investigaciones necesarias sobre la posibilidad de propagación de contaminación.
Citada por la agencia de noticias Tasnim, la institución afirmó que no se registraron indicios de fuga.
Por lo tanto, no existe peligro para los habitantes que viven alrededor de los sitios mencionados, apuntó.
En similar sentido se pronunció Akbar Behnamjoo, gobernador de la provincia de Qom, donde se ubica Fordow, una instalación en su mayor parte localizada bajo decenas de metros bajo tierra.
Tengan la seguridad de que no existe riesgo de radiación para los ciudadanos, ni siquiera a 500 metros de las instalaciones, afirmó el funcionario, citado por Tasnim.
No existe peligro para la vida ni la seguridad de la población, coincidió Morteza Heydari, portavoz de la Jefatura Provincial de Gestión de Crisis de Qom, tras calificar el ataque como “un acto despreciable y contrario a todas las normas jurídicas internacionales”.
Un reportero que Tasnim, que visitó la región de Fordow, y afirmó que “las condiciones en la zona ahora son normales, la vida continúa y ni siquiera se ven humo o llamas”.
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