Ponderoso es un macho de alrededor de 450 kilos y llegó a León, noroeste de España, después del cierre del zoológico de Matapozuelos (Valladolid), donde fue hallado en condiciones de abandono.

En el caso de Luna, vino procedente de un zoológico alemán gestionado por la aseguradora Santa Lucía y anteriormente estuvo en un circo húngaro.

Ambos fueron ubicados en un pequeño recinto de apenas 700 metros cuadrados dentro del Coto Escolar, un aula de naturaleza de 12 hectáreas que opera como espacio educativo para escolares desde 1984. Y durante años, el asunto despertó airadas críticas de organizaciones de protección animal.

La polémica de esos grupos con el Ayuntamiento de León se centraba en el poco espacio y condiciones de vida para dos animales de gran tamaño. Ahora, se cerraré el caso con el traslado de Luna y Ponderoso al santuario alemán de Gnadenhof fur Baren, en Munich, especializado en osos.

De acuerdo con el Heraldo de León, una empresa especializada en transporte de animales salvajes está a cargo de la preparación de los osos antes del viaje.

En tal sentido, ya les ha puesto vacunas antirrábicas y otra antiparasitaria como paso previo y antes del viaje, se les sedará para facilitar que puedan ser introducidos en los vagones en los que irán.

El viaje lo harán despiertos, acompañados por un veterinario y dos conductores, con el fin de que el trayecto no se demore para los animales. Además, estarán monitorizados durante todo momento con control de temperatura y humedad.

Todas las medidas se adoptan en función de la avanzada edad de los osos, que se unirán a otros 14 ejemplares de su raza en Alemania.

El Partido Animalista PACMA, Sacrificio Cero León y la Fundación Oso Pardo fueron las protagonistas de las protestas por el caso de Luna y Ponderoso, que parece llegar a su fin.

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