Durante el encuentro celebrado los días 17 y 18 los representantes de las 19 economías miembros más la Unión Europea y la Unión Africana adoptaron un comunicado en el que subrayaron la necesidad de enfrentar riesgos actuales y emergentes mediante políticas coordinadas que impulsen el crecimiento sostenible y la estabilidad global.

En el texto los participantes reiteraron su apoyo a la independencia de los bancos centrales como pilar esencial para mantener la estabilidad de precios y ajustarán las políticas monetarias de manera prudente, basándose en datos y respetando sus mandatos institucionales.

En la cita el G20 reconoció el rol central de la Organización Mundial del Comercio (OMC) para garantizar unas reglas claras y justas en el intercambio comercial, aunque admitió que la institución enfrenta importantes desafíos y requiere “una reforma significativa, necesaria y global” para adaptarse a la realidad económica contemporánea y responder mejor a las demandas internacionales.

En el comunicado final se instó a implementar políticas macroeconómicas que incrementen el potencial de crecimiento a largo plazo, fomentando la inversión pública y privada, garantizando la sostenibilidad fiscal y promoviendo reformas estructurales que mejoren la productividad y generen empleos de calidad.

Los Ministros destacaron asimismo la importancia de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) analice con mayor profundidad los desequilibrios macroeconómicos excesivos y proponga reformas específicas para cada nación, coordinadas multilateralmente, que contribuyan a una economía mundial abierta y a un crecimiento global sustentable.

Además los ministros expresaron su preocupación por las vulnerabilidades de deuda en países de bajos y medianos ingresos, enfatizando la necesidad de abordar estos problemas de forma integral y sistemática.

Ratificaron también su respaldo al Marco Común del G20 para la reestructuración de deuda soberana y solicitaron a instituciones como el FMI y el Banco Mundial explorar medidas de asistencia adecuadas para países con problemas de liquidez, pero con deudas sostenibles.

Otros temas abordados fueron la financiación sostenible, la adaptación al cambio climático, la inversión en infraestructuras, la inclusión financiera y la cooperación tributaria, incluyendo la implementación de un impuesto mínimo global.

La próxima reunión ministerial del G20 está prevista para octubre de este año en Washington, coincidiendo con la Asamblea del FMI y el Banco Mundial, mientras que la Cumbre de Líderes del grupo se llevará a cabo en noviembre en Johannesburgo, bajo la presidencia sudafricana.

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