En los últimos meses, señala la publicación el mercado de la construcción en Hanói se ha visto inmerso en una “fiebre de arena” sin precedentes, lo que disparó el valor de este material esencial en el sector de la construcción y tan popular como importante, con diversas consecuencias.
“Los altos precios de la arena y la escasez de oferta amenazan la seguridad financiera y el progreso de la construcción de proyectos, erosionan las ganancias de las empresas, y obligan a las personas a asumir enormes deudas o a posponer su sueño de establecerse”, subraya el texto.
Tras analizar el mercado de materiales de la construcción en los últimos días, los reporteros del periódico descubrieron que el costo de la arena negra se duplicó y el de la amarilla, un material importante en las estructuras de hormigón, aumentó el 58 por ciento.
No solo aumentaron los precios, sino que el suministro de arena también cayó en una grave escasez, constató la publicación, que cita a la propietaria de un depósito de materiales de construcción según la cual la cantidad de este material que llega allí disminuyó el 90 por ciento con respecto a lo normal.
Otro comerciante entrevistado señaló que en casi 30 años dedicado a este negocio nunca se encontró en una situación así. “Antes vendía miles de metros cúbicos de arena al día, pero en los últimos dos meses no he podido importar ni un solo camión”, relató.
El aumento del precio de la arena ha puesto a las empresas constructoras y a los ciudadanos en una situación extremadamente difícil, advierte Hanoi Moi y cita los resultados de una encuesta rápida realizada entre más de 50 empresas constructoras de la capital.
De acuerdo con el sondeo, hasta el 57,2 por ciento de las opiniones reflejaron que los planes financieros se vieron frustrados debido al alto precio de los materiales, especialmente de la arena.
De estas empresas, añade, casi un tercio tuvieron que suspender temporalmente la construcción o retrasar el avance de las mismas para esperar a que bajara el precio de los materiales.
Por otro lado, advierte el diario, “el alto precio de los materiales de construcción también afecta el costo de los bienes raíces, lo que dificulta el acceso a la vivienda, especialmente en los segmentos de vivienda asequible y social, que ya representan un gran desafío para las personas de ingresos bajos y medios en grandes ciudades como Hanoi”.
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