En declaraciones a Emisoras Unidas, la titular explicó la decisión adoptada por los docentes como por acatar las órdenes judiciales, a partir de que recibieron 850 de ellos una nueva multa de cuatro mil quetzales (casi 540 dólares).

Esta puede ser una de las razones, subrayó en el programa A Primera Hora, mientras descartó que eso signifique que las órdenes se cumplan retornando a las aulas, lo cual calificó de verdaderamente clave para el sistema.

Reveló que de alguna manera esperaba que levantaran el campamento, por la presión de resoluciones de las cortes, al tiempo en que recalcó que la cartera tiene cuatro meses activas de diálogo con el Sindicato de Trabajadores de la Educación de Guatemala (STEG).

Todas están funcionando, aseguró Giracca, quien ejemplificó que este martes estarán dos instaladas y mañana otra sobre el pacto colectivo, cuyos resultados quedan en actas.

Estimó que esas cuatro mesas constituyen espacio suficiente para el intercambio, al cual se sumaron con fuerza las organizaciones de padres de familia, líderes comunitarios, entre otros.

La ministra señaló que las acciones del STEG no solo interrumpieron las clases, sino además el derecho a la alimentación, al juego, al aprendizaje.

Negó poder confirmar cuántos docentes volvieron a sus centros, aunque aseveró que cada día tienen más abiertos, con un problema serio en los departamentos de Huehuetenango e Izabal, sobre todo en el primero con la mitad cerrada.

La titular llamó a los docentes a que retomen las clases, a que cumplan con la ley, “porque el Ministerio de Educación debe de ser ejemplo de eso”.

Enfatizó en casos de coacción, amenaza, en los cuales los maestros se vieron obligados a cerrar las escuelas, actos de violencia que tildó de inadmisibles, mucho menos en el sector.

Llegamos al Ministerio de Educación para hacer las cosas de forma diferente, para recuperar la rectoría del organismo, y esto pasa por muchos temas de orden administrativo, pero también político y de toma de decisiones, reflexionó Giracca.

Recobramos a través de procesos transparentes, abiertos y públicos la contratación de nuevos docentes, entre otras, describió.

El líder del STEG, Joviel Acevedo, lleva más de dos décadas de presionar a los gobiernos de turno con su supuesto poder de movilización, de acuerdo analistas locales.

Con el paso de los años copó espacios del Ministerio de Educación y ahora expresa su inconformidad con perder tales áreas de poder “real y efectivo”, afirmó días atrás el vicetitular de esa cartera, Francisco Cabrera.

mem/znc