De acuerdo con fuentes locales citadas por el medio, una columna de 10 vehículos todoterreno con militares avanzó desde la base ilegal de Tal Ahmar hacia la carretera que comunica las localidades de Brega y Koudna, donde instaló un punto de control.

En paralelo, otro convoy de igual número de vehículos ingresó en la aldea de Ruwaihinah y se desplazó hacia Rasm al-Halabi.

Con anterioridad, cinco transportes militares entraron en la localidad de Al-Rafid y continuaron su avance hacia Al-Jalaa, en el sur de la gobernación.

Asimismo, otra patrulla israelí salió de Al-Adnaniyah rumbo a Rwaihinah, compuesta por varios vehículos y dos tanques, que se desplegaron en las afueras de la localidad.

Las tropas de Tel Aviv se retiraron después de completar sus operaciones en varias aldeas, dejando tensión en la línea de separación.

Desde la caída del gobierno de Bashar Al-Assad el 8 de diciembre de 2024, los ataques israelíes contra Siria se han intensificado, con cientos de incursiones aéreas y terrestres dirigidas contra posiciones militares e infraestructuras estratégicas, con el objetivo declarado de impedir su reconstrucción. Las autoridades sirias han reiterado su condena a estas acciones, que consideran una violación flagrante del derecho internacional y de la soberanía nacional, así como una amenaza directa a la estabilidad de la región.

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