La cifra de fallecidos es, paradójicamente, imprecisa en estos momentos, con el agravamiento del estado de salud de bomberos y efectivos encargados de controlar los siniestros, voluntarios y vecinos en condición de desaparecidos.
En Oimbra, Galicia, están ingresados tres brigadistas, uno en estado muy grave y los otros dos graves; mientras en Valladolid, hay cuatro personas en estado crítico y una grave.
Por lo menos siete carreteras permanecen cortadas este viernes ante la amenaza de expansión de los incendios, además de la congestión por el día festivo que marca un puente hasta el lunes.
Expertos advirtieron que los siniestros, en razón de las elevadas temperaturas del país (por encima de los 35 grados como promedio), ayudan a su propagación y en distancias incluso por encima de los 50 kilómetros, suponen un peligro para las autopistas y autovías en general.
El tema aterrizó en su peor versión dentro del ámbito político. Primero el conservador Partido Popular (PP) acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de no tener un plan de medidas preventivas ante los incendios.
Luego, al ponderarse por los medios que la responsabilidad del asunto de los fuegos forestales está a cargo de las Comunidades Autónomas, en su mayoría dirigidas por el PP, la organización liderada por Alberto Núñez Feijóo cambió su discurso.
Ahora la andanada de crítica del PP al Ejecutivo se enfoca en la carencia de aviones suficientes para apagar los incendios, por culpa de no tener aprobados los Presupuestos del Estado del curso actual.
En paralelo, estás los mensajes publicados en redes sociales, incendiarios, nunca mejor dicho, contra los políticos que prefirieron seguir de vacaciones antes que asumir responsabilidades y personarse en los lugares de estas tragedias en España.
Los ácidos intercambios en X se dieron básicamente de ministro de Transportes, Oscar Puente, contra presidentes de regiones como Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y Andalucía, Juanma Moreno, por no suspender sus vacaciones para afrontar la situación con los fuegos en sus zonas.
Un reciente reporte del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS, por sus siglas en inglés), España sufrió este año 208 incendios forestales, que dañaron mas de 110 mil hectáreas.
La fuente indicó que la superficie nacional calcinada en lo que va de 2025 es más del doble que la que ardió durante todo 2024, algo que lamentablemente, puede cambiar todavía más desfavorablemente.
De todos modos, el EFFIS significó que el récord de siniestros de este tipo en España lo mantiene el año 2022, cuando se quemaron 306 mil 555 hectáreas.
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