El informe precisa que en el periodo se registraron alrededor de 1,5 millones de episodios de allanamiento de viviendas, lo cual impactó a unos 1,1 millones de hogares, equivalente al 5,7 por ciento del total nacional.

De ellos, un 43,4 por ciento denunció total o parcialmente los hechos ante la Policía.

Asimismo, se contabilizaron unas 259 mil incidencias de robo violento en viviendas, que perjudicaron a 213 mil hogares (1,1 por ciento). Poco más de la mitad de esas familias, el 51,3 por ciento, informó los sucesos a las fuerzas del orden.

En cuanto a los delitos sufridos de manera individual, añade Stats SA, el robo de bienes personales se mantuvo como el más frecuente, con cerca de 1,3 millones de casos que afectaron a 1,2 millones de ciudadanos mayores de 16 años, equivalente al 2,6 por ciento de esa franja poblacional.

Sin embargo, solo el 31 por ciento reportó esos incidentes.

El segundo ilícito más habitual en ese nivel fue el fraude al consumidor, con más de 811 mil episodios que alcanzaron a 566 mil personas.

En ese caso, detalla la entidad estadística, la proporción de denuncias alcanzó apenas el 35 por ciento, lo que refleja cierta desconfianza hacia la efectividad de los mecanismos de justicia.

En relación con la percepción de seguridad, el documento indica que el 81 por ciento de la población adulta expresó sentirse segura caminando sola en su vecindario durante el día, en contraste con apenas un 36,1 por ciento que manifestó la misma confianza de noche.

Tal diferencia es más marcada en las mujeres, quienes admitieron un temor mayor que los hombres.

Como respuesta preventiva, 43,3 por ciento de los sudafricanos declaró haber implementado medidas para protegerse, en comparación con el 39,9 por ciento del año anterior.

Entre esas prácticas, la más común fue restringir desplazamientos a horarios considerados más seguros, adoptada por cerca del 30 por ciento de los encuestados.

La seguridad pública en Sudáfrica constituye una de las principales preocupaciones sociales y políticas, en medio de llamados a reforzar la eficacia policial y la cooperación ciudadana.

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