El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lin Jian, se pronunció durante la rueda de prensa regular al ser consultado sobre las declaraciones del director general del OIEA, Rafael Grossi y del canciller iraní, Abbas Araghchi.

Calificó el acuerdo como un paso positivo hacia la reducción de las tensiones en el tema nuclear iraní y la reconstrucción de la confianza mutua.

Lin señaló que la situación actual alrededor del programa nuclear de Irán sigue siendo frágil.

Instó a todas las partes a intensificar los esfuerzos diplomáticos y mantener un diálogo constructivo.

Subrayó la necesidad de evitar acciones que puedan conducir a una mayor escalada de la situación.

El portavoz abogó por una pronta reanudación de las negociaciones para alcanzar una solución justa y duradera.

El Programa de Acción Integral Conjunto, firmado en 2015, se encuentra en un punto muerto desde que Estados Unidos se retiró del acuerdo en 2018 bajo la administración Trump.

Las tensiones se han exacerbado tras la reimposición de sanciones económicas de los países occidentales liderados por Washington contra Teherán que afectan severamente su economía.

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