La Campaña Nacional para la Recuperación de los Cuerpos de los Mártires explicó en un comunicado que la cifra incluye los cadáveres de 76 menores de edad y de 10 mujeres.
Detalló que otros 86 palestinos fallecieron mientras estaban encerrados en cárceles israelíes, donde se reportan sistemáticas torturas y vejaciones contra los reclusos.
Según datos oficiales, desde el inicio del último ciclo de violencia, en octubre de 2023, las Fuerzas Armadas de Israel mataron a más de 67 mil palestinos en el enclave costero y más de 900 en la Ribera Occidental.
Los palestinos denuncian que el vecino país retiene muchos cuerpos como medida de presión para disuadir ataques y utilizarlos como herramienta para negociar con las milicias y los familiares.
En 2020, el gobierno israelí amplió esta estrategia para incluir no solo las personas vinculadas al Movimiento de Resistencia Islámica sino a todos los palestinos que murieron en presuntos ataques contra el país.
Recientemente, el Centro de Asistencia Legal y Derechos Humanos de Jerusalén señaló que muchos cadáveres están enterrados en cementerios militares y son identificados solo por números.
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