En un comunicado leído en una de las actividades del evento que reunió a cientos de delegados de 25 países de América Latina y el Caribe, además de España, Líbano y Estados Unidos, los amigos nicaragüenses calificaron a Cuba como un faro que ilumina el camino de los revolucionarios.

El texto destacó que la lucha solidaria con la isla debe enmarcarse en el contexto global actual, donde “las fuerzas que promueven un orden mundial más justo enfrentan a quienes se aferran a un sistema en decadencia basado en la imposición, las sanciones y las agresiones imperiales”.

Asimismo, ratificaron su compromiso con la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, e instaron a fortalecer la unión, la soberanía alimentaria, tecnológica y cultural, así como la defensa irrestricta de la autodeterminación de los pueblos.

“La defensa de Venezuela, Cuba y Nicaragua, de los países del ALBA-TCP y de toda la región, es hoy la defensa de nuestro futuro compartido frente al monólogo de las potencias. Proponemos el diálogo entre civilizaciones y la cooperación solidaria como pilares para un mundo de paz”, expresaron los delegados nicaragüenses.

En su pronunciamiento, también reafirmaron el apoyo a la causa del pueblo palestino, víctima de la “salvaje ocupación sionista”, y su compromiso con la lucha por la independencia de Puerto Rico, en la búsqueda de su plena soberanía.

Finalmente, hicieron un llamado a exaltar la resistencia indígena, negra y popular desde el Río Bravo hasta la Patagonia, e invocaron el pensamiento de José Martí, Simón Bolívar y Augusto C. Sandino como fuerza estratégica para la unidad de los pueblos de América Latina frente a las amenazas del imperialismo estadounidense.

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