Un total de 600 brigadas con tres mil servidores públicos iniciaron ayer las visitas a las viviendas de los estados de Veracruz, Hidalgo, Puebla, Querétaro y San Luis Potosí, impactados por lluvias que dejaron hasta el momento más de 60 fallecidos.

La presidenta Claudia Sheinbaum resaltó el lunes que se trabaja de manera conjunta con las administraciones estatales y municipales para atender a los ciudadanos y aseguró la existencia de recursos suficientes para hacerle frente a la emergencia.

“Que sepa el pueblo de México que vamos a dar el alma, como siempre la damos, pero en particular en esto. Y que no estamos escatimando ningún esfuerzo, ningún apoyo”, expresó la mandataria durante su habitual encuentro con periodistas.

Del 6 al 9 de octubre se registraron intensas precipitaciones derivadas de la Perturbación Tropical 90-E, particularmente en las cinco entidades federativas mencionadas.

Según la coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, el día 8 cayeron 280 mm de lluvia en Veracruz y 286 mm en Puebla, lo cual ocasionó el aumento del nivel de los ríos y de los arroyos aledaños a estos estados.

“No había ninguna condición científica, meteorológica, que pudiera indicarnos que la lluvia iba a ser de esta magnitud”, señaló la jefa del Ejecutivo ante una pregunta de la prensa.

Hasta el momento, las autoridades reportan 64 personas fallecidas y 65 sin localizar, así como 111 municipios afectados y 100 mil viviendas con perjuicios.

Desde el 6 de octubre el gobierno federal, junto a las administraciones estatales y municipales, atiende la situación, mediante un despliegue con elementos de las secretarías de Defensa y Marina, que incluye aeronaves, cocina móvil, lanchas, maquinaria pesada y plantas potabilizadoras.

La Comisión Federal de Electricidad y la Secretaría de Infraestructura prosiguen el trabajo para restituir completamente el servicio eléctrico y solucionar las interrupciones en carreteras, respectivamente.

Otras instancias del país, como el Senado, también extendieron su solidaridad a las familias afectadas.

La presidenta de la cámara alta, Laura Itzel Castillo, encabezó la víspera la apertura de un centro de acopio para recolectar víveres para los damnificados.

lam/las