Durante más de tres horas, el mandatario compartió con los diputados no solo los datos de lo realizado en el transcurso de un año, sino que tomando en cuenta el medio siglo de independencia nacional que se celebrará el próximo 11 de noviembre, abordó la trayectoria del país en ese lapso. Comentó que en 1975 el Sistema Nacional de Salud contaba con solo 320 unidades de diferentes niveles y categorías, la esperanza de vida era de 41 años, la tasa de mortalidad infantil era de 134,5 por cada mil nacidos vivos, entre otros datos.
Esas cifras, gracias a las acciones emprendidas han sido superadas, como lo demuestra la existencia de tres mil 355 unidades de salud, con 44 mil 222 camas disponibles, de las cuales mil 609 son de cuidados intensivos, entre otros avances como la introducción este año de la cirugía robótica.
Se refirió igualmente a la formación de personal para el sector y las proyecciones que existen tanto en la inversión en instalaciones como en la graduación de médicos, enfermeras y técnicos de diagnóstico y terapia, hasta completar 38 mil profesionales para 2027.
Lourenço subrayó que todas esas acciones permitieron enfrentar diversas epidemias y en particular mencionó el brote de cólera que vivió el país en los primeros cuatro meses del año.
Asimismo, sostuvo que pronto se inaugurarán centros sanitarios y volverán a abrir sus puertas otros completamente restaurados.
En general, mencionó la mejoría en indicadores como la mortalidad infantil, con 32 por cada mil nacidos vivos y el aumento de la esperanza de vida a 64,6 años, entre otros.
Añadió que la industria farmacéutica se convertirá en una realidad en el país y remarcó que una de las prioridades en materia social es el incremento del acceso a la educación y al mercado laboral tras la formación.
El jefe de Estado detalló que se labora en una reforma en la educación técnica y profesional y el aumento de instituciones de esta enseñanza, así como se invierte en incrementar el número de aulas disponibles en la enseñanza general para disminuir el número de niños sin escolarizar.
Al respecto mencionó inversiones por alrededor de 200 millones de dólares para reducir el déficit de aulas en las provincias de Luanda e Icolo e Bengo, además de la movilización de unos 500 millones de dólares para la construcción y rehabilitación de escuelas primarias en todo el país, la formación y contratación de profesionales de la educación.
También aseguró que gradualmente se implementará el Programa Nacional de Alimentación Escolar, que atenderá a más de cinco millones de estudiantes, y la continuidad de las inversiones para mejorar la red de centros de educación superior.
Angola pasó de tener en 1975 una sola institución de esa enseñanza a 106 en la actualidad, distribuidas en 19 de las 21 provincias del país, y continúa comprometida con la creación de capacidades y centros de ciencia, sostuvo.
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