El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lin Jian, afirmó que Murayama fue “un viejo amigo del pueblo chino”.

Recordó que durante su visita a China en mayo de 1995 recorrió el puente Lugou y el Salón Conmemorativo de la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa, donde escribió una inscripción sobre la amistad y la paz duradera entre las dos naciones.

El vocero mencionó que el 15 de agosto de ese mismo año, con motivo del 50 aniversario de la rendición incondicional de Japón, Murayama pronunció un discurso oficial en el que expresó una profunda reflexión sobre el dominio colonial y la agresión de su país, y ofreció disculpas a las víctimas de la guerra.

“Como político con sentido de la justicia, siempre se recordará la contribución del señor Tomichi Murayama a la promoción de la amistad entre China y Japón”, señaló Lin.

El portavoz subrayó que este año se conmemora el 80 aniversario de la victoria de la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa y la Guerra Antifascista Mundial, y destacó la importancia del denominado “Discurso Murayama” como una declaración solemne del gobierno japonés sobre su pasado de agresión y colonización.

Lin instó a Japón a enfrentar y reflexionar sobre su historia, mantener el camino del desarrollo pacífico y ganarse la confianza de sus vecinos asiáticos y de la comunidad internacional mediante acciones prácticas.

El funcionario añadió que Beijing espera trabajar con Tokio para promover relaciones constructivas y estables que respondan a las exigencias de la nueva era.

Murayama, quien gobernó entre 1994 y 1996, es recordado por su postura conciliadora y su “Discurso Murayama”, considerado un hito en la reconciliación de Japón con los países afectados por la Segunda Guerra Mundial.

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