Dichos organismos sanitarios califican la situación de preocupante y buscan evitar la propagación de la mencionada dolencia en medio del complejo escenario de inseguridad.
La OMS/OPS evalúa los avances de los trabajos de rehabilitación emprendidos por la Dirección Nacional de Agua Potable y Saneamiento, y las necesidades de insumos médicos, higiene y saneamiento, puntualizó el diario Haití Libre.
Por su parte, el rotativo Le Facteur Haiti precisó que las áreas puestas en alerta roja son: Delmas, Cité-Soleil y Pétion-Ville.
El Ministerio de Salud Pública y Población de Haití desplegó a sus trabajadores de campo y lograron descontaminar 233 espacios, al tiempo que distribuyeron tabletas Aquatabs y se trataron las fuentes de agua.
Esta batalla va acompañada de una campaña de sensibilización a gran escala para ayudar a la población a prevenir la enfermedad.
Con anterioridad, el diario digital The Haitian Times, recordó que Haití pasó más de un siglo sin un caso de cólera hasta 2010, cuando las fuerzas de paz de la Organización de Naciones Unidas de Nepal contaminaron el río Artibonito con aguas residuales infectadas.
Dicho brote se propagó rápidamente, al enfermarse unas 820 mil 300 personas y matando a casi 10 mil.
Tras años de esfuerzos coordinados de salud pública, Haití notificó su último caso confirmado en enero de 2019.
La OMS y la OPS declararon la enfermedad eliminada en febrero de 2022. Ese progreso se desvaneció en octubre de 2022, cuando surgieron nuevas infecciones en Puerto Príncipe durante un período de disturbios civiles y una crisis humanitaria cada vez más grave.
El cólera se está propagando de nuevo, especialmente entre las personas desplazadas por la violencia de pandillas, lo que pone de relieve la fragilidad del sistema de salud del país y la urgente necesidad de acceso a agua potable y saneamiento en campamentos y zonas de alto riesgo.
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