Durante su intervención en la Asamblea General, minutos antes de la votación del proyecto de resolución presentado por Cuba, el diplomático calificó ese cerco de más de seis décadas, como el principal instrumento de una política de agresión extrema diseñada para someter al pueblo cubano.
“Causando dolor y sufrimiento, asfixiando su economía e intentando provocar un cambio de gobierno en una nación soberana que no se doblega ante los designios del imperio”, expresó.
Denunció que la práctica impositiva del poder imperial “erosiona la confianza de los pueblos en el sistema multilateral y desvirtúa el papel de las Naciones Unidas”, e instó a los Estados miembros a romper con la lógica unipolar para consolidar un mundo multipolar basado en el respeto, la justicia y la soberanía.
“El avance hacia un orden multipolar se sustenta en alianzas más justas y solidarias, en la defensa del derecho internacional y en el rechazo a las medidas coercitivas unilaterales que violan la Carta de las Naciones Unidas”, expresó.
El representante nicaragüense calificó de inaceptable y vergonzoso que algunos Estados persistan en aplicar “inhumanas e ilegales medidas arbitrarias y selectivas”, las cuales consideró armas de chantaje y castigo contra pueblos dignos e independientes.
Hermida subrayó que el bloqueo estadounidense constituye “un acto deliberado de guerra económica y un castigo colectivo que viola masivamente los derechos humanos de toda una nación” mediante el cual atenta contra la vida, la salud, la alimentación, la educación y el derecho al desarrollo del pueblo cubano.
Asimismo, denunció la inclusión de Cuba en la lista unilateral del Departamento de Estado de los Estados Unidos que acusa falsamente al país caribeño de patrocinar el terrorismo. “Cuba solo patrocina vida, cooperación y hermandad. Esa es la lista en la que Cuba honrosamente participa”, enfatizó.
El diplomático destacó la resistencia del pueblo cubano, al que calificó como “faro de dignidad y solidaridad internacional”, recordando que miles de médicos, maestros, ingenieros y deportistas de la isla han compartido salud, educación, ciencia y esperanza con los pueblos del mundo, en particular ante desastres y crisis sanitarias.
“Nicaragua es testigo vivo y agradecido de esa solidaridad cubana. Condenamos en los términos más enérgicos este bloqueo ilegal, inmoral e inhumano, e insistimos en su fin inmediato, total e incondicional”, afirmó.
Recordó que desde hace 33 años consecutivos la Asamblea General de la ONU ha exigido el levantamiento del bloqueo, decisión respaldada por la abrumadora mayoría de los países miembros, mientras Estados Unidos persiste en su política unilateral y anacrónica.
“El heroísmo y el ejemplo de Cuba son fieles a su vocación internacionalista, siempre dispuesta a contribuir al bien común de la humanidad”, concluyó el representante nicaragüense.
Cuba logró este miércoles otra victoria en la ONU tras obtener 165 votos a favor de la resolución que pide el fin del bloqueo de Washington contra La Habana.
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