Lo que en principio era la organización sencilla de una fiesta para otorgar estos lauros de ficción, Springsteen lo convirtió en un concierto íntimo sorprendiendo a los invitados al recinto.
Young Lions se otorga cada primavera a un escritor de 35 años o menos por una novela o colección de cuentos.
Springsteen fue uno de los seis homenajeados en la gala anual Library Lions que rinde tributo a los “logros sobresalientes” en las artes, la cultura, las letras y la investigación.
Otros galardonados con medallas fueron la productora y escritora Shonda Rhimes y los autores James Patterson, Daniel Kehlmann y Louise Erdrich, así como el autor y músico James McBride.
Celebrada en el salón principal de investigación de la sucursal de la Quinta Avenida en Manhattan, la ceremonia fue breve y sin discursos de aceptación, pero el presidente de la NYPL, Anthony Marx, prometió una “sorpresa especial” que estaba por venir, presentando así a Springsteen, quien ya tenía una guitarra en la mano.
He tocado en ferias de bomberos, en locales de bowling o en pizzerías”, relató Springsteen a los cientos de asistentes. He tocado en pistas de hockey, en bodas, en Bar Mitzvahs, en manicomios y en estadios de fútbol americano, pero nunca he tocado en una maldita biblioteca, provocó risas y aplausos,
El roquero se acomodó para una interpretación lenta y sentida de “Thunder Road”, improvisando la parte final que antes interpretaba el saxofón de Clarence Clemons.
Ante una ovación de pie y los familiares gritos de “Bruuuuce”, deseó a todos buenas noches y añadió el mensaje: Cada vez que lees un libro que te impacta hay una especie de redefinición de ti mismo, de tu hambre, principios, moral, ética y deseos. Que tengan una buena noche… ¡y vayan a leer un libro!
Springsteen tiene un historial de actuaciones sorpresa. En el Festival de Cine de Nueva York a finales de septiembre apareció tras la proyección de la biografía Música de ninguna parte, protagonizada por Jeremy Allen White en el papel del músico y cantó “Land of Hopes and Dreams”.
mem/dpm