El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Oncu Kocali, expresó esa posición en una publicación en la red social X, donde comentó los recientes bombardeos israelíes contra la ciudad de Beit Jinn, al oeste de Damasco, la capital siria.

Kocali afirmó que las acciones militares de Israel buscan obstaculizar los esfuerzos del gobierno y el pueblo sirios para afianzar la seguridad, la prosperidad y la paz social.

El portavoz denunció que, pese a no enfrentar amenaza alguna procedente de Damasco, Israel continúa violando la soberanía e integridad territorial de Siria mediante operaciones y movimientos militares que ponen en riesgo a la población civil y a la estabilidad regional.

Según las cifras preliminares del Ministerio de Salud sirio, el bombardeo israelí provocó al menos 13 muertos, entre ellos mujeres y niños.

La localidad de Beit Jinn se ubica en las laderas del Monte Hermón, a unos 10 kilómetros de la línea de separación con el Golán ocupado. La zona ha sido blanco frecuente de bombardeos aéreos, ataques de artillería e incursiones terrestres temporales, en el marco de las acciones que Tel Aviv mantiene en territorio sirio.

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