Según afirmó el mandatario en una entrevista con el diario Les Échos, medio especializado en temas económicos, durante su reciente visita de Estado al gigante asiático dejó clara esta postura.

Macron cumplió entre el miércoles y el viernes una intensa agenda en China, donde junto a su par anfitrión, Xi Jinping, coincidieron en cuestiones de gobernanza global, la cooperación en el uso pacífico de la energía nuclear, la atención a los desafíos de la humanidad, como el cambio climático, y la búsqueda de la paz en Ucrania y Palestina.

Los comentarios de este domingo del presidente galo contrastan en alguna medida con la imagen de una visita que reforzó alianzas estratégicas, aunque los temas comerciales se sabe que generan agudas diferencias París-Beijing, y prueba de ello es la cruzada en curso en Francia contra el gigante de la llamada moda efímera Shein.

Les dije que si no actúan en los próximos meses, los europeos nos veremos obligados a tomar fuertes medidas, similares a las de Estados Unidos, entre ellas los derechos de aduana, adelantó.

Al respecto, alegó además que el proteccionismo de Washington agrava las cosas, provocando que China redirija el flujo masivo de sus productos hacia el viejo continente.

De acuerdo con diversas fuentes, el déficit comercial entre la UE y China superó los 300 mil millones de dólares. Actualmente estamos bajo una presión doble, de ahí que enfrentemos una cuestión de vida o muerte para la industria europea, advirtió Macron.

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