El portavoz de la Cancillería Lin Jian hizo estas declaraciones al rechazar un borrador de informe del Pentágono que atribuye al gigante asiático el despliegue de más de 100 misiles balísticos intercontinentales en sus tres silos subterráneos más recientes.

De acuerdo con el vocero, este tipo de afirmaciones forman parte de una práctica habitual de Washington para justificar la aceleración de la modernización de su arsenal nuclear.

Apuntó que esas acciones socavan la estabilidad estratégica global y llamó a la comunidad internacional a mantener una evaluación clara de la situación.

Asimismo, subrayó que Estados Unidos, como el país con el mayor arsenal nuclear del mundo, debe cumplir su responsabilidad prioritaria en el desarme nuclear mediante reducciones sustanciales y efectivas.

Beijing publicó recientemente el libro blanco «Control de armas, desarme y no proliferación de China en la nueva era», en el cual expone de forma integral su política nuclear y su posición en materia de control de armamentos.

El portavoz indicó que China mantiene el compromiso de no ser la primera en usar armas nucleares, aplica una estrategia nuclear defensiva y conserva su fuerza nuclear en el nivel mínimo necesario para su seguridad.

También destacó que el gigante asiático participa activamente en los procesos de revisión del Tratado de No Proliferación Nuclear y en el mecanismo de diálogo de los cinco Estados poseedores de armas nucleares.

Estados Unidos y China figuran entre los principales actores del sistema internacional de no proliferación, en un contexto marcado por tensiones estratégicas y debates sobre el futuro del control de armamentos a nivel global.

lam/idm