El llamado pide detener los cruentos ataques que se registran en la zona de Catatumbo, en el noreste del país, que ya dejan víctimas fatales, y también solicita respeto a la población civil y un alto al fuego de los combates con los grupos residuales de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

También la delegación del Gobierno colombiano en la Mesa de Diálogos de Paz con el Estado Mayor de los Bloques Jorge Suárez, Gentil Duarte y el frente Raúl Reyes rechazó la violencia que tiene lugar en Norte de Santander.

En su comunicado, el equipo gubernamental atribuyó las acciones ofensivas al ELN que, según apuntó, están dirigidas contra la población civil, los firmantes de paz de la región del Catatumbo, y los delegados del Estado Mayor del bloque Gentil Duarte en la Mesa de negociaciones.

“La delegación del Gobierno Nacional se solidariza con las familias afectadas por los hechos de violencia en este territorio y exige al ELN cesar las hostilidades en una región que le ha apostado a la paz y a las transformaciones territoriales”, refirió la nota.

Afirmó que valora el llamado a la paz hecho por los representantes del Estado Mayor del Bloque Gentil Duarte para que cesen los ataques por parte del ELN.

“Como delegación, destacamos la decisión del Gobierno de reforzar la presencia y la acción de la fuerza pública en defensa de la vida y la protección de la población civil”, acotó la comunicación.

Ante la situación, el Ejército de Colombia anunció la presencia de tropas en los municipios de Teorama, Convención, Tibú y La Gabarra, todos en Norte de Santander, como una medida de protección para la ciudadanía ante los enfrentamientos entre el grupo armado organizado residual Estructura 33 y el ELN.

De acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, los combates en la región dejan ya al menos cuatro víctimas fatales.

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