Durante una reunión de trabajo con la comisaria europea para el Mediterráneo, Dubravka Šuica, Albares insistió en que 2025 es un año clave para el Mediterráneo, y la paz en Oriente Medio debe ser una prioridad de la política europea.

Según la Cancillería, Albares reafirmó la voluntad de España de contribuir al fortalecimiento de la política mediterránea de la UE.

En ese sentido, trasladó la disposición de España a colaborar con la Comisión para que el nuevo Pacto por el Mediterráneo permita aprovechar todo el potencial de la relación entre la Unión Europea (UE) y la Vecindad Sur.

Al respeto, se pronunció por mejorar la formación y empleo; conectividad, comercio e inversiones; energía limpia y seguridad, así como una apuesta decisiva y mayores recursos de la UE para fortalecer las instituciones regionales, en particular la Unión por el Mediterráneo (UpM).

El diplomático sostuvo un encuentro además con el secretario general de la UpM, Nasser Kamel, para analizar los desafíos a los que se enfrenta el Mediterráneo y las oportunidades que se presentan en 2025.

Además de conmemorar el 30 aniversario del Proceso de Barcelona (que dio lugar a la UpM) este año, España seguirá acompañando el impulso renovado que la UE da a su política en la zona, con la preparación y posterior adopción del Pacto para el Mediterráneo.

También el ministro dijo que la UpM está llamada a completar el proceso de reforma iniciado hace dos años, impulsado por España y Francia.

ro/ft