El impacto de las políticas aplicadas por el gobierno de Javier Milei en el vecino país queda en evidencia por el aumento del índice de la pobreza al 52,9 por ciento, lo cual afecta sobre todo a mujeres, niños y jubilados, señala un comunicado divulgado aquí.

Mientras crece el desempleo, se desmantela el carácter protector del Estado y disminuye la capacidad de las personas al acceso a los bienes esenciales.

La declaración está firmada por la Confederación Regionalista Verde Social, el Frente Amplio y los partidos Comunista, Humanista y Socialista.

A la grave situación económica, se suma la reducción del espacio para el ejercicio de los derechos civiles y políticos, con la vulneración de la libertad de reunión, detenciones arbitrarias y criminalización de las manifestaciones políticas.

Por otra parte, los defensores de los derechos humanitarios en la nación trasandina son blanco de ataques en las redes sociales y los medios de comunicación afines al gobierno de Milei, agrega el documento.

En su declaración, la entidad condena la derogación del decreto que creaba la Unidad Especial de Investigación, fundamental para la búsqueda de desaparecidos realizada por las Abuelas de Plaza de Mayo, la reducción de trabajadores de la Secretaría de Derechos Humanos y los sitios de memoria.

Los partidos políticos chilenos firmantes del documento exigieron a la administración de Javier Milei respetar los pactos y tratados internacionales, que son vinculantes para el país independientemente de quién ejerza el gobierno.

Asimismo, expresaron su solidaridad con el pueblo argentino, en particular con el movimiento de derechos Humanos, simbolizado en las Madres y Abuelas de la Plaza de Mayo, la organización H.I.J.O.S y de Familiares de Desaparecidos por Razones Políticas.

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