Un comunicado del ministerio de Asuntos Exteriores instó al gobierno de transición sirio a asumir la responsabilidad de prevenir nuevos ataques, investigar los incidentes y exigir responsabilidades a los responsables.
Hacemos un llamamiento a todas las partes para que pongan fin a la violencia, indicó el comunicado.
El documento subrayó que solo poniendo fin a la violencia, Siria podría lograr la paz social después de décadas de confrontaciones.
También destacó la importancia de iniciar un proceso político integral para asegurar la paz y la estabilidad a largo plazo en el país.
El futuro del país debe estar en manos de todos los sirios, independientemente de su etnia, religión o género, libres de cualquier intento extranjero de desestabilizarlo, concluyó el comunicado.
Durante los últimos días, las provincias costeras sirias de Latakia y Tartus han sido testigos de ataques coordinados por parte de los leales al gobierno de Asad.
En respuesta, las fuerzas de seguridad y militares lanzaron amplias operaciones para localizar a los atacantes, lo que llevó a enfrentamientos feroces, mientras los funcionarios del gobierno afirman que la situación está avanzando hacia una estabilidad total.
Bashar Assad, líder de Siria durante casi 25 años, tuvo que abandonar el país y dirigirse a Rusia el 8 de diciembre, al poner fin al gobierno del Partido Baath, que estaba en el poder desde 1963.
Ahmed al-Sharaa, quien lideró las fuerzas de oposición, fue declarado presidente por un período de transición el 29 de enero.
ro/amp





