El parlamentario Ali Fayyad enfatizó que Líbano se enfrenta a un intento impulsado desde el extranjero de remodelar su identidad política, cultural y social.

Para el miembro del bloque Lealtad a la Resistencia, los estadounidenses y otros interfieren en las decisiones políticas, desde la seguridad portuaria hasta las reformas financieras y económicas y los intentos de imponer la normalización con Israel.

Fayyad subrayó la necesidad de la retirada israelí de los territorios ocupados, el respeto a la soberanía y la disposición a la reforma sin absolver al Estado de sus deberes de reconstrucción.

De acuerdo con el representante de Hizbulah, el verdadero enfoque para estabilizar a la nación es el cese de las hostilidades y la adhesión a la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU.

En esta misma línea, Hassan Fadlallah destacó que la causa central para cualquier diálogo interno en la nación debe considerar a Israel enemigo del Estado libanés.

Según el diputado, la estrategia de defensa es un asunto interno que debe consensuarse entre quienes creen que Israel es el enemigo.

El dirigente criticó a quienes no consideran a Tel Aviv como un enemigo y siembran divisiones internas, acusándolos de justificar y promover a la entidad sionista.

Fadlallah confirmó que Hizbulah completó el 80 por ciento del proyecto de alojamiento y rehabilitación, y continuará la labor pese a los intentos de obstaculización.

Insistió que esto no exime al Estado de su responsabilidad ante su pueblo, en particular en lo relativo a edificaciones destruidas e infraestructura.

En este contexto, el también miembro de Lealtad a la Resistencia Ihab Hamadeh, señaló que la postura de Hizbulah es clara desde el principio: las armas solo se discuten en el contexto de una estrategia defensiva que preserve la soberanía e independencia del Líbano.

Hamadeh indicó que la Resistencia fue pionero en reconocer las amenazas regionales y no entregará sus bastiones para permanecer expuesto al enemigo israelí.

Al denunciar la guerra psicológica y las presiones sobre Hizbulah, el diputado aseguró que «cualquiera que hable de una estrategia destinada a desarmar la Resistencia en favor del Israel es delirante y está conspirando contra los libaneses».

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