Tras cuatro días de debates, fueron presentados los avances para consolidar la ruta crítica de los grupos de trabajo respecto a la gestión de esta problemática, que en 2024 destruyó en Bolivia más de 12 millones de hectáreas con la correspondiente biodiversidad.
“Es de sabios aprender experiencias ajenas. A nombre del presidente Luis Alberto arce Catacora queremos expresar todo nuestro agradecimiento por haber definido que sea Bolivia sede de este encuentro (…)”, afirmó Ruiz en su intervención.
Al propio tiempo, hizo un reconocimiento a todos los equipos técnicos de las diferentes organizaciones que posibilitaron el desarrollo con éxito de este encuentro.
Ruiz acotó que Bolivia y los países de todo el mundo enfrentan la crisis climática, lo que perjudica a las economías y la producción de alimentos, por lo cual se deben buscar soluciones.
“Sin agua no hay vida -alertó Ruiz-, y sin plantas ni bosques, no hay agua y duele saber que hay líderes mundiales que creen que esta no es una agenda mundial”.
La reunión se constituyó en una base más dentro del Plan Nacional de Acción para la Prevención de Incendios Forestales y la Estrategia Nacional de Manejo Integral del Fuego del Estado Plurinacional de Bolivia, se informó.
Participaron en este foro expertos de las agencias nacionales de países de América Latina como Argentina, Bolivia; Brasil, Ecuador; Chile, Colombia; Guyana, México; Paraguay, Perú; Suriname y Uruguay.
Asimismo, concurrieron representantes de la Unión Europea y organismos internacionales como la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente y la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica.
En el contexto de las cuatro jornadas de esta reunión, los participantes visitaron la comunidad indígena Quitunuquiña y, posteriormente, el municipio de Roboré, en la provincia cruceña de Chiquitos para intercambiar experiencias sobre el manejo de inccendios con la participación de comunidades locales.
La visita concluyó con charlas magistrales dirigidas a medioambientalistas, autoridades municipales y departamentales.
Por su parte, el jefe de la delegación de la Unión Europea en Bolivia, Jaume Segura, sostuvo que este tipo de encuentros son esenciales para intercambiar experiencias y conocimientos entre todos los países de América Latina y el Caribe.
Agregó que “para todo el equipo de Europa es un orgullo poderlos acompañar. Los incendios no conocen de fronteras y solamente si nos juntamos y aprendemos unos de otros podremos luchar contra este fenómeno”, concluyó.
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