El plan fiscal y de presupuesto, impulsado por el presidente Donald Trump y ya aprobado en la Cámara de Representantes, que se debate actualmente en el Senado, incluye sensibles reducciones al Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) y Medicaid.
La misiva, publicada por Feeding America, fue firmada por 31 destacadas personalidades de la industria del entretenimiento, entre ellas estrellas de Hollywood de renombre como Matt Damon, Scarlett Johansson, Michelle Williams, Alan Cumming, Kristin Chenoweth, Sheryl Crow, Live Schreiber y otros.
Según el contenido de la carta, millones de personas dependen del SNAP y Medicaid para llegar a fin de mes, y “estos programas les permiten vivir de forma más saludable y digna, lo que a su vez ayuda a las comunidades de todo Estados Unidos a prosperar”.
“El Congreso está considerando un proyecto de ley que implementaría algunos de los mayores recortes a SNAP y Medicaid en la historia de Estados Unidos, eliminando nueve mil 500 millones de comidas al año a través de SNAP y dejando a cientos de miles de personas sin Medicaid y sumidas en la inseguridad alimentaria”, subrayó el texto.
“Esto es inaceptable e incorrecto. No es la forma en que las personas en este país se tratan entre sí cuando enfrentan tiempos difíciles”, añadió la carta abierta al exhortar “al Congreso a rechazar los recortes a estos programas vitales que ayudan a millones a llevar comida a sus mesas y brindan acceso a la atención médica”.
La versión final del proyecto de ley aún debe llevar los cambios significativos que introducirá la Cámara Alta. La Cámara Baja votará el plan actualizado.
Tanto el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, como el líder de la mayoría del Senado, John Thune, son optimistas en que la iniciativa legislativa vaya al escritorio de Trump antes de la fecha límite autoimpuesta del 4 de julio.
Los republicanos, que controlan la Cámara Baja, endurecerían los requisitos de elegibilidad para el SNAP. El proyecto de ley inicial también incluía importantes reformas a Medicaid que, según se estima, provocarían la pérdida de cobertura de millones de personas para 2034.
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