En una carta dirigida a los organismos internacionales, el titular sostuvo que la escala y el propósito de la destrucción infligida a la población civil en Gaza, especialmente niños y mujeres, superó el umbral de una crisis humanitaria.

La autoridad describió al colapso del sistema de salud pública en Gaza, como la destrucción deliberada de la esencia de la vida humana.

Zafarghandi instó a la comunidad internacional a responder de inmediato y con eficacia al castigo colectivo, la limpieza étnica y el genocidio que tienen lugar en el territorio palestino asediado.

Al lamentar las condiciones extremadamente difíciles y dolorosas que enfrenta la población en Gaza, señaló que muchos bebés mueren en brazos de sus madres debido a la desnutrición severa y la deshidratación.

El ministro condenó las atrocidades cometidas por Israel y pidió una serie de acciones inmediatas por parte de la comunidad internacional, incluido el establecimiento de hospitales de campaña y equipos de respuesta a la crisis nutricional, y la facilitación de vuelos humanitarios de las Naciones Unidas para transportar alimentos especiales para bebés.

A su vez, llamó a la Organización de Cooperación Islámica a aprobar de inmediato resoluciones destinadas a levantar el asedio de Gaza y asignar recursos financieros y logísticos de emergencia para intervenciones vitales.

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