En entrevista con el espacio La Hora de la Uno de TVE, el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, aprovechó para hacer un llamamiento a los voluntarios que combaten los incendios forestales que afectan a varias comunidades autónomas a acatar inmediatamente las indicaciones de las autoridades.
También pidió a la población a «obedecer y acatar inmediatamente las indicaciones» de las autoridades» y la Guardia Civil para que los vecinos de las zonas afectadas abandonen sus lugares cuando hay una situación de riesgo.
«Nmaros encontramos en situaciones de máximo riesgo y las que mejor dan las indicaciones son las autoridades».
Más de una decena de incendios en desarrollo y la amenaza de brote de otra cantidad similar, marcan el panorama de España en medio de un tórrido verano y tormentas secas.
El titular remarcó que el Gobierno dispone de los medios necesarios y precisos para enfrentarse a una situación muy compleja desde el minuto uno y reiteró que mantiene un canal de diálogo permanente con la Comisión Europea para recabar asistencia en los casos necesarios.
Paco Castañares, presidente de la Asociación Extremeña de Empresas Forestales y de Medio Ambiente, declaró a la prensa que esta andanada de siniestros en España vuelve a poner en cuestión la ausencia histórica en el país de emprender medidas preventivas de largo alcance.
Cada año se repite la máxima de nuestros abuelos, los incendios se apaguen en invierno, es decir que si se adoptaran las iniciativas requeridas en su momento, no tendríamos problemas tan graves como los actuales, destacó.
En esa línea, Castañares explicó que crear condiciones favorables para impedir la propagación del fuego costaría unos dos mil euros, mientras que apagar un siniestro se eleva a 20 mil, por lo cual solicitó a los responsables afrontar el asunto con absoluta altura de miras hacia el futuro.
Según un reciente reporte del Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS, por sus siglas en inglés), España sufrió este año 201 incendios forestales, que devastaron 105 mil 106 hectáreas.
La fuente indicó que la superficie nacional calcinada en lo que va de 2025 es más del doble que la que ardió durante todo 2024, algo que lamentablemente, puede cambiar todavía más desfavorablemente.
De todos modos, el EFFIS significó que el récord de siniestros de este tipo en España lo mantiene el año 2022, cuando se quemaron 306 mil 555 hectáreas por 493.
Cuatro personas sospechosas de provocar incendios forestales permanecen detenidas en España, según fuentes del Ministerio del Interior.
De los detenidos, un trabajador forestal confesó sus delitos para ser contratado y apagar el fuego, con lo cual logró 10 días de trabajo en Avila. Sus acciones provocaron la muerte de un miembro del operativo de emergencias y la devastación de dos mil 200 hectáreas.
También están a disposición de la justicia una mujer de 63 años, en Muxia, Galicia, donde testigos la señalan en las zonas donde se produjeron cinco incendios y en Ourense, también en Galicia, un joven de 28 años fue sorprendido cuando pretendía generar fuego.
En la misma provincia de Ourense, se detuvo a otro ciudadano al que se relaciona con el origen de 20 fuegos provocados.
Además, en Tarifa, Cádiz, sur de España, se investiga a una persona en prisión preventiva como como presunto autor del siniestro que ha devorado más de tres mil hectáreas hasta el momento.
Con el añadido de tormentas secas con fuertes vientos, los incendios tienen en jaque al país ibérico, con amenazas de grave peligro en zonas de mucha vegetación y sin incidencia agrícola.
La ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sara Aagesen, pidió este miércoles «unidad y la coordinación» entre todas las administraciones frente a los incendios forestales simultáneos que azotan a España.
Aagesen aprovechó para remarcar que estos sucesos vuelven a poner en la palestra una realidad incontestable: «aviso de que el cambio climático está ahí» y hay que emprender medidas.
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