Nuestro país atraviesa por una crisis de seguridad, económica y política cuya solución requiere de un hombre de experiencia, afirmó Gbagbo, de 80 años de edad, cuya candidatura en los comicios de octubre próximo fue vetada por el Poder Judicial.
El exmandatario fue desalojado del poder por la fuerza a principio de la década pasada, cuando rehusó aceptar la victoria electoral de Ouattara quien estaba exiliado.
En su alocución, Gbagbo calificó de inconstitucional la aspiración de Ouattara a un cuarto mandato consecutivo, basada en una reforma de la Carta Magna, aprobada en julio pasado.
oda/msl





