El ministro del Interior, John Reimberg, confirmó la cifra este lunes, cuando en varios puntos del país hubo movilizaciones convocadas por el movimiento indígena en rechazo a la decisión gubernamental de eliminar el subsidio al diésel.

Desde la ciudad de Latacunga, sede temporal del Ejecutivo y donde hubo marchas de quienes apoyan el paro y de simpatizantes del Gobierno, Reimberg reconoció que existen vías cerradas en la provincia de Imbabura, en el norte ecuatoriano.
“Pero la Fuerza Pública ya está conversando con ellos, y cuando no se puede, hacemos uso de la fuerza”, reconoció el funcionario que justificó la detención de 15 personas porque “atentaron contra los servidores policiales y militares”.
Por otro lado, en el cantón Otavalo, en Imbabura, varias personas resultaron heridas, tras la actuación de los uniformados, y la Cruz Roja atendió a manifestantes con lesiones en la cabeza y el rostro, provocadas por el impacto de bombas lacrimógenas, según reporte de la prensa local.
Por otro lado, la Policía Nacional informó que esta tarde se produjo un ataque al Comando de Policía de Otavalo, donde se registraron daños materiales significativos, en lo que ellos calificaron como actos terroristas, resultado de los cuales dos servidores policiales terminaron heridos.
En ese contexto, la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) denunció una represión desmedida, ejercida por la fuerza pública, con grandes cantidades de gases lacrimógenos y cartuchos de perdigones contra manifestantes.
“Se destinan tantos recursos para reprimir al pueblo, en lugar de atender sus demandas legítimas y necesidades básicas. ¡Exigimos cese inmediato de la violencia y respeto a los derechos del pueblo!”, reclamó la Conaie.
Con miras a desactivar las manifestaciones, desde la semana pasada Noboa declaró estado de excepción en ocho de las 24 provincias del país y en cinco de ellas hay toque de queda, lo cual no impidió las protestas de esta jornada.
El mandatario advirtió que quienes incumplan la ley durante las manifestaciones «serán denunciados por terrorismo y se irán 30 años presos».

Más temprano, el gobernante afirmó que no cederá ante quienes, según él, quieren desestabilizar al país con el paro nacional.
Estamos ahora peleando una batalla contra el sectarismo, contra la gente que quiere desestabilizar al Ecuador y no vamos a ceder ni un milímetro”, declaró Noboa durante un acto en la provincia andina de Cotopaxi.
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