Somos fervientes defensores del acuerdo de la OPEP+ para que podamos garantizar un futuro energético para todos, declaró la vicemandataria al intervenir este miércoles en forma virtual en la Semana de la Energía de Rusia 2025.
La ministra bolivariana de Hidrocarburos denunció que Estados Unidos quiere controlar toda la energía del planeta para poder sostener “un modelo de control hegemónico que es sencillamente insostenible”.
Aseveró que la República Bolivariana está hoy bajo la amenaza militar del gobierno estadounidense con el propósito principal de apoderarse de su petróleo, del gas y de sus vastas reservas, lo cual repercutiría en la fórmula energética mundial y en el desarrollo futuro de esos recursos.
Rodríguez señaló que la Organización de Países Exportadores de Petróleo aporta en la actualidad el 56 por ciento de la demanda de crudo, el 43 % de la producción mundial de hidrocarburos, y posee el 81 por ciento de las reservas mundiales del líquido combustible.
Añadió que el 26 por ciento de la producción de petróleo mundial y el 43 % de las reservas están hoy bajo medidas coercitivas unilaterales.
Al respecto, significó el surgimiento de un nuevo mundo, liderado por los países del grupo Brics, el cual, dijo, “promueve el respeto al derecho internacional, la cooperación y la complementariedad” y cuyos actores van a ir confluyendo en la construcción de ese futuro.
La vicegobernante se refirió a los vínculos estratégicos entre Venezuela y Rusia, que de conjunto representan el 24 por ciento de la energía del mundo, y llamó a su consolidación “para la felicidad de los pueblos principalmente”.
A finales de septiembre, la Asamblea Nacional (parlamento) aprobó la Ley Aprobatoria del Tratado de Asociación Estratégica y Cooperación entre Caracas y Moscú, que fortifica todavía más las relaciones estratégicas entre ambas naciones.
El presidente del parlamento consideró de trascendental importancia que la Asamblea Nacional haya aprobado y refrendado esa iniciativa, y la valoró como “expresión de la hermandad y la manera diferente de relacionarse los pueblos y gobiernos.
Estimó que es sumamente alentador que las relaciones entre Rusia y Venezuela “sean cada vez más sólidas, fructíferas y beneficiosas para el futuro de ambos pueblos”.
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