Iniciaremos inmediatamente la construcción de una cárcel de máxima seguridad con capacidad para dos mil reclusos que estará lista en 12 meses, expresó el mandatario en un mensaje trasmitido en cadena nacional.
Este proyecto responderá a los más altos estándares en prisiones de esta naturaleza, lo cual reforzará las capacidades de resguardo y control de la población reclusa y su construcción estará a cargo del cuerpo de ingenieros del Ejército de Guatemala, detalló.
En paralelo, acotó el jefe de Estado, seguiremos remozando y reforzando las prisiones para elevar los estándares de seguridad y garantizar que su control esté en manos de las autoridades y no de los criminales.
Tercero, puntualizó, realizaremos el censo de la población penitenciaria del país, lo que nos permitirá tener por primera vez en la historia información efectiva sobre la identidad y localización de cada uno de los y las privadas de libertad.
Este paso, para el que nunca se contó con voluntad política, lo ejecutaremos con equipo de alta tecnología biométrica, lo que permitirá una máxima seguridad, subrayó.
El Gobernante explicó que ordenó establecer una fuerza de tarea coordinada por la instancia de asuntos de seguridad la cartera de Interior, junto con la Comisión Nacional contra la Corrupción, entre otros órganos de control interno.
Tendrá el mandato –precisó- de revisar los procesos administrativos y normativos, generar controles efectivos, terminar con prácticas ilegales e identificar responsables y corregir las fallas estructurales en dos instituciones clave: la Policía y el Sistema Penitenciario (SP).
La respuesta debe ser integral y atacar la raíz del problema, consideró Arévalo, quien afirmó que la reforma profunda del SP es ahora una prioridad absoluta para su administración.
Negó que puedan seguir permitiendo que las cárceles sean espacios vulnerables donde el Estado pierde el control, pues la nación “merece instituciones sólidas y pondré todos los recursos del Estado al servicio de este objetivo”.
Pero esta lucha no es únicamente del Gobierno, señaló, mientras recordó que hace unas semanas presentaron al Congreso una iniciativa de Ley antipandillas para poder contar con todas las herramientas y combatir efectivamente este problema.
Celebró que la víspera el Legislativo aprobara en tercera lectura esa normativa y llamó urgente a los diputados a que en la siguiente sesión la aprueben de manera definitiva.
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