Fue presentado por la diputada del Frente Amplio, Inés Cortés, y busca ampliar el alcance de la protección estatal y cerrar vacíos legales ante la “extrema vulnerabilidad” que padecen en el país las infancias y adolescencias.
“Durante el año 2024, el Sistema Integral de Protección a la Infancia y la Adolescencia contra la Violencia (SIPIAV) intervino en ocho mil 924 situaciones de violencia hacia niñas, niños y adolescentes”.
Ello significa un promedio de 24 casos por día, uno por hora, argumenta la exposición de motivos de la iniciativa.
En su articulado propone reconocer y tipificar nuevas formas de violencia: vicaria—y al filicidio como su agravante—, digital y comunitaria.
La violencia vicaria es una manifestación de la violencia basada en género y generaciones que implica que el varón ejerza violencia sobre sus hijas e hijos con el objetivo de devastar la existencia de la mujer.
El proyecto prohíbe expresamente la revinculación obligatoria con agresores, por lo que plantea derogar artículos de la Ley 20.141, que actualmente regula la tenencia compartida, al considerar que su aplicación puede exponer a menores a situaciones de peligro.
Promueve al respecto decisiones de custodia basadas en el interés superior del niño y la escucha obligatoria a niños y adolescentes en procesos judiciales.
Asimismo, busca reforzar el rol del SIPIAV como órgano rector, crea un comité interinstitucional para coordinar políticas públicas y exige campañas permanentes de sensibilización, mecanismos ágiles de denuncia y acompañamiento integral.
El texto ingresará a la Comisión de Constitución y Códigos de la Cámara de Diputados, donde se espera que reciba aportes y ajustes durante el tratamiento legislativo.
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