Una sesión del Consejo de la Universidad nacional atendió la demanda presentada por el representante de los colegios profesionales William Méndez, quien alertó sobre «la gravedad» del hecho, originado tras la publicación de reportajes sobre el Instituto Costarricense de Electricidad por dicha publicación.

La alta instancia universitaria rechazó las amenazas y mensajes hostiles contra Zúñiga, mientras la directora del Semanario, Laura Martínez, sostuvo en un artículo que este “siempre se mantendrá como un medio combativo, de denuncia y crítica de la realidad nacional e internacional”.

Zúñiga –explicó el medio de prensa- recibió en su correo institucional mensajes intimidatorios provenientes de una cuenta identificada como propiedad de un individuo llamado Marcelo Seravalli.

Las ofensas comprendían frases como “Mátese”, “Son un cáncer para la sociedad”, “Terrorista”, y otras contra personas cercanas al comunicador, en tanto uno de los correos advierte que “lo tenemos identificado’.

En nombre de los colegios profesionales, su representante Méndez alertó “a la comunidad universitaria y también al país sobre esta peligrosa situación que están viviendo los periodistas costarricenses”.

“La libertad de prensa –aseguró- no es una lucha por quién tiene la razón. Es una lucha diaria por la búsqueda de la verdad. Si nosotros los periodistas incomodamos es porque estamos haciendo bien nuestro trabajo, porque estamos cerca de la verdad; una verdad -enfatizó- que algunos no quieren que sea expuesta”.

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