En medio del escozor permanente de la geopolítica mundial, España desliza una mirada a China como apuesta de futuro, con una máxima perceptible de cooperación multilateral.
Virtudes y defectos también en el análisis, las perspectivas de una superpotencia en fase de consolidación como aliado indispensable, estuvieron en primer plano en las ponencias de un evento efectuado en Madrid, impulsado por el grupo Mundo Financiero de José Luis Barceló, Editor-Director.
Pese a desafíos como la dependencia del carbón, destaca el liderazgo chino en el impulso de las energías renovables como los paneles solares o vehículos eléctricos y también el financiamiento verde.
China, como emisor de CO2, afronta estos retos con ambición. Inversión masiva en energías renovables; su compromiso con la neutralidad de carbono para 2060, que incluye políticas de «doble carbono» (pico en 2030, neutralidad en 2060).
De tal forma, incentiva la innovación tecnológica y financiamiento verde a través de bonos sostenibles. Sin embargo, persiste la dependencia del carbón, que aborda con transiciones graduales para evitar disrupciones económicas, posicionándose como potencia en la economía verde.
El encuentro contó con el apoyo de la Agencia China de Noticias Xinhua y el bufete de abogados Cremades & Calvo-Sotelo, como réplica en Europa de forma paralela de la Conferencia sobre Inversión y Finanzas Climáticas 2025 “Bahía de la Perla” PBCIFC con sede en la ciudad china de Guandong.
Los expertos recordaron que China asumió importantes compromisos climáticos globales firmando el Acuerdo de París en 2015. Asimismo, es líder global en energías renovables siendo hoy por hoy el mayor fabricante mundial de paneles solares y turbinas eólicas.
Proyecta actualmente una capacidad combinada de 1.2 mil millones de kW en energía solar y eólica para 2030, desplazando el uso de carbón y reduciendo emisiones.
Otros éxitos de China en su lucha determinada contra el cambio climático han sido su destacaba contribución a la reforestación y conservación plantando miles de millones de árboles, para reducir la desertificación.
En su introducción, José Luis Barceló destacó el hito que representa la celebración del 50 aniversario de las relaciones de España con China, en un año en el cual el rey Felipe VI y la reina Letizia acaban de visitar al gigante asiático. Antes lo hizo el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
El profesor de Macroeconomía Superior y Economía de la Unión Europea (UE) Antonio Miguel Carmona, a su vez docente de Economía de la Universidad de Beijing, remarcó la importancia de que el acercamiento entre España y China se consolide y se pueda asumir un papel de liderazgo.
A su turno, el periodista experto en China Javier Martín-Domínguez, vicepresidente de la Asociación de Periodistas Europeos,recordó a la figura de Mao Zedong como punto de partida del desarrollo de su país.
En particular, se refirió al pasaje de la diplomacia que terminó con los nexos con Estados Unidos con la intermediación de Kissinger y las formalidades completadas por Richard Nixon en el entorno de 1972.
Otros ponentes en la cita fueron el historiador Fernando Moragón, analista, consultor y docente especializado en Rusia, Asia Central y China, quien valoró que la oportunidad de una “Europa decandente” está precisamente en estrechar más los lazos con Beijing.
Además, Ramón Boixados, profesor de Association for Supply Chain Management y María Jose Garcia López, profesora titular de la Universidad Rey Juan Carlos y Socia de la empresa de consultoría de sostenibilidad, Triple Sustainability.
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